Probablemente estés en tus primeras semanas de embarazo y ya sientas ese molesto cambio en ti, y si, son los gases, éstos que te hacen sentir hinchada o tal vez pueda que su aparición sea unos meses más adelante, son pocas las embarazadas que se libran de éste molestoso compañero.
Y es que se debe a los cambios hormonales (la progesterona relativa el funcionamiento del aparato digestivo), así como en el aumento del tamaño del feto que aprisiona el estómago y los intestinos, todo lo cual dificulta las digestiones especialmente al final del embarazo, cuando son más frecuentes las indigestiones y la acidez.
Respecto al ardor o acidez, es una sensación de quemazón en la boca del estómago que sube por el esófago y a menudo va acompañada de una repetición de eructos.
¿Cómo Reducir los gases en el embarazo?
Es importante que te encuentres lo mejor posible en esta etapa y tal vez puedas hacer algo por reducir los molestos gases en el embarazo, trabajando para mejorar las digestiones. Sigue estos consejos:
- Evita las comidas pesadas, esas que aumentan la sensación de hinchazón y sobrecargan el sistema digestivo. Ojo, no se trata de pasar hambre, sino de aumentar el número de comidas al día, tomando menos cantidad y escogiendo los alimentos más saludables para el embarazo.
- Come tranquilamente, despacio, sin engullir y sin estar incómoda. Comer apurada hace que tomemos más aire junto a los alimentos, así como la tensión o la ansiedad durante las comidas. Mastica bien los alimentos para facilitarle la tarea al estómago.
- Evita los alimentos que producen gases, que pueden variar de una persona a otra. Posiblemente, ya conozcas cómo reacciona tu cuerpo a determinados alimentos, pero en general se puede decir que las cebollas, los granos, el brócoli, la coliflor, los alimentos fritos y los postres ricos en azúcar suelen producir más gases que otros.
- Abstenerse de las bebidas con gas. Éstas solo empeoran la situación en vez de aliviarlas, evita las sodas y aguas gasificadas.
- Intenta ser regular en la evacuación y no estar mucho tiempo sin ir al baño, lo cual favorecería la acumulación de gases.
- No retengas los gases. Evidentemente, puedes buscar el mejor lugar para librarte de ellos y por suerte a la embarazada se le presuponen las visitas frecuentes al baño.
- Además, para mejorar las digestiones en general, puedes controlar tu aumento de peso, no llevar prendas ajustadas, no acostarte inmediatamente después de haber comido, evitar las comidas muy grasientas o especiadas, practicar ejercicio de manera habitual…
- Si lo que te preocupa son los eructos, evita las comidas que «repitan» con olor fuerte como el ajo o determinados fritos.
En fin, tengamos en cuenta que todas las personas emitimos gases cada día, y que si estás embarazadas probablemente sufras más de estas molestias. Por suerte, una vez después del embarazo vuelven a su nivel habitual.
¿Sabías que mientras el útero crece van en aumento los gases? los expertos aconsejan que las mujeres embarazadas caminen durante el embarazo, si es posible una media de una hora al día. Estar en movimiento ayuda a frenar la aparición de gases y a eliminar los existentes.
